La Organización Mundial de la Salud ha advertido que para mediados del presente siglo la población mundial rozará los 9.000 millones de persona y no sólo harán falta robots quirúrgicos e industriales, sino muchas otras aplicaciones. La carencia de recursos alimenticios va a ser un contratiempo de inmensa gravedad por lo que se apremia desde las instituciones a ampliar las cosechas. A pesar de ello, esta necesidad hace frente a las plagas que nos amenazan y que dificultan la obtención de un importante número de recursos.
Todo hace apuntar una de las soluciones a este problema internacional va a estar en manos de los sistemas robotizados. Un proyecto europeo llamado GreenPatrol busca descubrir posibilidades y garantías con las que optimizar los rendimientos de las siembras y generar cosechas sostenibles para el ecosistema.
Ahí es donde aparece Tekniker, un integrante del ecosistema Basque Research and Technology Alliance (BRTA) que se sitúa en el país vasco. Su trabajo en GreenPatrol se centra en ampliar las producciones agrícolas en los invernaderos mediante el uso de sistemas robotizados.
La empresa de robótica de Gipuzkoa se ocupa del diseño del software y del Hardware de GreenPatrol, que es un robot agrícola especializado en detectar plagas. Una vez las reconoce, personaliza el veneno que precisa para destruir los insectos.
Es un Vehículo de guiado autónomo que dispone de sensores visuales e inteligencia Artificial para analizar los cultivos. Mediante Deep Learning desarrollado por Tekniker, localiza en su base de datos los parásitos que localiza, el periodo de crecimiento en la que se encuentran y cuál es el método más adecuado para su erradicación de manera selectiva.
Una vez se ha individualizado el pesticida a usar, el robot cuenta con un brazo robótico que sitúa el tratamiento exclusivamente en las áreas dañadas. Para desplazarse por el invernadero de manera totalmente autónoma utiliza el Sistema de navegación europeo GNSS Galileo. En estos momentos el robot se encuentra en fase de pruebas en entornos reales y se aguarda que para verano del 2020 se puede legalizar su uso. Una vez alcanzado ese paso, se espera comercializar el robot agrícola en un breve plazo de tiempo.